Propaganda Política

Siempre trato de no abordar temas politicos o religiosos por respeto a mis lectores y porque pienso que todas las ideas, creencias o no creencias forman parte del mundo donde vivimos y necesitamos hacer mejor. Cuando uno habla de estos temas casi siempre los escritos se tornan excluyentes de algún grupo o preferencia y pienso que en nuestra sociedad uno debe ser incluyente y tolerante. Pero todo tiene un limite y el mio llego hoy...

A raíz de toda la propaganda a que nos tienen sometidos lo medios de comunicación en este tiempo de campaña política, me doy cuenta que no creo que exista la vocación de político en casi ningún candidato de ningún partido.

La verdad en que no encuentro otro objetivo para estos políticos que defender sus intereses personales, entre los que encabeza el ego. Tanto talento para el arte de la mentira y el engaño desperdiciado, hablan y se comunican tan bien con el pueblo que el pueblo pudiera pensar que el candidato se siente parte de ellos. Pienso que serian realmente exitosos en otra área, como humoristas, movilizadores de masa, anunciadores de lucha libre… Tantas profesiones dignas en las que pudieran degollar en forma brillante.

Miro sus anuncios por televisión y observo el modo de comportarse cada uno, que en cierta forma no se diferencian, cada cual quiere hacerse notar y dejar la huella en la retina colectiva, algo que logra cualquiera que sale en la tele, y aparte de querer sobresalir, lo hacen con pocos meritos propios y se apoyan en las debilidades del resto para marcar la diferencia.

De todas formas es divertido verlos, me acordé cuando iba de pequeño al mercado y los vendedores se atropellaban ofreciendo verduras y precios, hablando más fuerte o con intención para llamar la atención y que luego uno se acuerde de ellos a la hora de elegir. Recuerdo la teoría de Darwin y me asombra lo poco evolucionada que se encuentra en mi país.…

Se promocionan, proponiendo lo que la gente quiere oír, no importa si estaba en los planes o si seria mejor para el país… Creo que a pocos les importa el futuro del país. Pagan costosísimas campañas muchas veces con dinero de dudosa procedencia para elegirse o reelegirse, campañas carentes de dirección y programa político pero cargadas de engaños y promesas nunca cumplidas.

La ciudad esta contaminada visual, auditiva y psicológicamente. La enorme cantidad de pancartas colocadas en los sitios más inverosímiles nos arropan la vista, ensucian la ciudad, causan accidentes y no creo que las remuevan de forma ordenada al acabar este bacanal.
Las eternas y bullosas caravanas hasta altas horas de la noche causan malestar entre los ciudadanos, para que extender más este discutido punto. Psicológicamente nos quieren arrastrar a una histeria colectiva que arrastra la razón, compra conciencias y ciega la visión clara que debe tener el votante.

Espero que muchos tengamos un voto conciente no influenciado por todo este caos en el que nos quieren ahogar.....

Miguelito